El término que mejor describe el sur del Adriático es legendario. Aquí encontrarás el supuesto lugar de nacimiento de Marco Polo, la cueva de Ulises, una isla que incluso los piratas temían, y por último pero no menos importante, el escenario donde se rodó la magnífica saga Juego de Tronos. Sigue los pasos de héroes históricos y ficticios, y diseña tu propia aventura en barco de leyenda.
Esta zona es conocida por su entorno virgen, salvaje y aislado. Como está un poco apartada, se puede disfrutar de una playa medio vacía y encontrar buenos amarres en los puertos incluso en temporada de verano.
El sur de Dalmacia es un lugar popular entre los navegantes con más experiencia. El clima puede cogerte por sorpresa, y la cantidad de muelles seguros es ligeramente inferior en comparación con las incontables posibilidades de Zadar o el área de Biograd. Que las distancias sean más largas también es un plus para los cruceros nocturnos: el desafío predilecto es atravesar la isla desierta de Palagruža, que da la sensación de estar navegando por el océano.
Sin embargo, el mágico sur de Dalmacia es perfecto para los que navegan por placer, para familias con niños o para los que buscan la tranquilidad más absoluta. Por tanto, este itinerario contiene lo mejor de un crucero de relax, uno que disfrutarás al máximo sin estrés y que figurará en tu cuaderno de bitácora como uno de los más TOP.
Ruta de navegación de siete días recomendada: Dubrovnik – Mljet (Polače) – Lastovo (Zaklopatica) – Korčula (Korčula town) – Mljet (Okuklje/Sobra) – Šipan (Šipanska Luka/Sudurad) – Lopud – Dubrovnik
El punto de partida ideal para tu aventura por el sur dálmata es Dubrovnik. Esta bonita ciudad tiene un gran atractivo, así que asegúrate de reservar suficiente tiempo para explorarla. Hay dos marinas entre las que elegir: ACI y Marina Frapa. Frapa es el único puerto con dos muelles protegidos por plexiglás, algo que valorarás si llueve o hace calor.
Desde Dubrovnik, nos dirigiremos hacia el norte y el noroeste. Las espléndidas islas de Mljet y Lastovo son sin duda un imperdible, y no deberías pasarlas por alto en tu itinerario. Ambas son parques naturales, cuya belleza virgen realmente merece una protección adecuada. Si tienes que recargar las pilas (las tuyas, por supuesto), descubrirás que aquí hay una fuente de energía excelente. Si te apetece descubrir lugares más animados y con una gastronomía soberbia, no te pierdas la isla de Korčula, donde se halla la pintoresca ciudad de Korčula, apodada «Pequeña Dubrovnik». Al final de la semana, también visitarás varias islas diminutas que forman parte del archipiélago de Elafiti, cerca de Dubrovnik.
Puedes navegar, en total, unas 140 – 160 millas náuticas (nm).
- Día 1 (sábado): check-in en ACI Marina Dubrovnik/Marina Frapa (0 mn)
- Día 2 (domingo): Dubrovnik – Mljet (Polače/Pomena) (33 mn)
- Día 3 (lunes): Mljet (Polače/Pomena) – Lastovo (Zaklopatica) (25 mn)
- Día 4 (jueves): Lastovo – Korčula (22 mn)
- Día 5 (miércoles): Korčula – Mljet (Okuklje/Sobra) (28 mn)
- Día 6 (jueves): Mljet (Okuklje/Sobra) – Mljet (Saplunara) – Šipan (Šipanska Luka/Sudurad) (11 mn)
- Día 7 (viernes): Šipan – Lopud – Dubrovnik (16 mn)
Puedes encontrar la ruta en Google Maps en este enlace.
La ruta para el mapa de Navionics está aquí.
Itinerario alternativo
Si tus planes no incluyen un crucero por Lastovo, añade una parada en la península de Pelješac. Orebič y Ston son lugares populares y seguros.
- Dubrovnik – Mljet (Okuklje) – Mljet (Polače) – Korčula town/Orebič – Ston/Žuljana – Šipanska Luka – Dubrovnik.
Qué ver en esta zona
Durante los meses de verano el viento suele ser favorable, pero el fuerte bora y el jugo local pueden suponer una sorpresa desagradable, sobre todo en los últimos años. Afortunadamente, el jugo se puede predecir bien con antelación, aunque dura varios días. Se recomienda evitar la parte occidental de Mljet cuando se prevé un bora fuerte, ya que las ráfagas de viento pueden ser enérgicas. En la península de Pelješac, en la bahía de Žuljana, dichas ráfagas pueden alcanzar una potencia de hasta 10 Bf.
El canal de Pelješac separa la isla de Korčula de la península de Pelješac. Evita este estrecho en caso de bora intenso. Debido a las potentes corrientes en chorro (el efecto de dos islas cercanas en la fuerza del viento), el viento procedente del NO y del SE en el estrecho alcanza hasta 2 Bf más que en mar abierto.
Día 1 (sábado): mundo cinematográfico de Dubrovnik
Cuando alguien menciona Dubrovnik, nos vienen a la mente al menos dos cosas: Juego de Tronos y las enormes murallas de la ciudad. Ambas cosas están relacionadas, ya que el muro de piedra fue utilizado como set de rodaje. En cuanto hayas recogido tu barco, ve al centro urbano de Dubrovnik: es un tesoro histórico a escala paneuropea.
Desde la marina ACI, se tardan menos de 20 minutos en llegar al casco antiguo tanto en taxi como en autobús, que sale cada pocos minutos desde la carretera principal. El Frapa Marina está mucho más cerca del centro de la ciudad..
La ciudad es un imbricado de románticas calles con apariencia de laberinto. Olvídate del mapa y déjate sorprender por sus callejones: puede que te lleven hasta alguno de sus muchos mercados. Los viernes, haz una parada en el mercado del antiguo puerto de Gruž
El centro de la ciudad tiene una zona peatonal dividida por la vibrante calle Stradun, que está repleta de tiendecitas y cafeterías. El monasterio franciscano, cuyo origen se remonta al siglo XIV, es una de las farmacias de Europa más antiguas que todavía siguen en funcionamiento. La magnífica fortificación de la ciudad es un monumento único y tiene tres entradas. Los turistas pueden acceder a dos kilómetros de estos gigantescos muros, desde donde se ven seis fortalezas, de las cuales la más impactante es Minčeta.
Otras atracciones interesantes son el Palacio del Rector, la Iglesia de San Blas y la Fuente Onofrio, que en su momento fue una de las pocas fuentes de agua potable que había. Prepárate para hacer ejercicio mientras deambulas por la ciudad: puedes dar más de 5.000 pasos.
Disfruta de las magníficas vistas de la ciudad y del mar desde el teleférico que va hasta el monte Srd.
Para acabar el día, vive un atardecer poco convencional dándote un baño en la playa Banje, que está cerca de la entrada a la ciudad de Ploče y para acceder a la cual hay que pagar. Si te apetece deleitarte con unas vistas de 360º de esta mágica ciudad desde sus baluartes y quieres experimentar arte culinario de calidad Michelin, reserva mesa en el restaurante Restaurant 360.
Nautika, cerca de la costa, el bistró Tavulin, cerca de la famosa iglesia de St. Blažej, y el puesto de pescado Barba. La comida más barata la encontrarás fuera del centro, en el puerto antiguo de Gruž del que hablábamos antes.
Día 2 (domingo): perla verde de Mljet (33 mn)
Como el 70% de Mljet está cubierto por bosque, es evidente el porqué del apodo “perla verde”. Navegar hasta esta isla verde no se parece a nada que hayas experimentado antes. Hoy tienes por delante el tramo más largo, así que pon rumbo a toda vela a primera hora. Tu recompensa será una isla con una tranquilidad divina y naturaleza virgen.
Lugares que merece la pena ver
Las vistas y el esplendor natural casi cursi de la isla de Mljet te impactarán. Según la leyenda, fue en la isla de Mljet donde la ninfa Calypso tuvo a Odiseo cautivo durante siete años.
Hoy te dirigirás al parque natural de la parte oeste de la isla. Las pequeñas ciudades de Polače y Pomena constituyen las puertas de acceso al parque, donde se paga la entrada. Es válida hasta el día siguiente al mediodía. Polače es el asentamiento más antiguo de la isla, cuyo origen se remonta a la época romana. Las ruinas romanas así lo demuestran.
Se puede llegar a los lagos Mali y Veli Jezero en media hora desde Polače dando un agradable paseo por el bosque. Allí está la diminuta isla de Sv. Marija, con un monasterio benedictino en el lago más grande. Puedes llegar hasta esta pequeña isla con un mini ferry. La otra opción es alquilar bicicletas en Polače y llegar hasta la costa, donde puedes blandir la bandera naranja (está colocada en un lugar visible) y el patrón local vendrá con un pequeño bote y te llevará a dar una vuelta por la isla. Vale la pena visitar los lagos y la isleta.
Nadar o ir a la deriva por la fuerte corriente que pasa bajo el puente de piedra de Mali, que conecta los dos lagos, también será una parte divertida del programa. El sentido de la corriente cambia según la marea. El agua de los lagos tiene una temperatura de hasta 4 grados más que la del mar y es incluso más salada, lo que notarás al nadar en ella. Como está prohibido entrar a la isla de St. Marija en traje de baño, te recomendamos dejar las actividades acuáticas para más tarde.
Si decides explorar el parque en bicicleta, y te recomendamos encarecidamente hacerlo, para junto al puente Veliki Most. A los turistas más aventureros les gusta saltar al agua desde el puente. Si tienes tiempo suficiente, puedes disfrutar de unas vistas de la isla adriática más verde que quitan la respiración. Desde la colina Montokuc, situada cerca del pueblo de Soline, o desde la colina Veliki Gradak, que se encuentra a menos altura y está junto al lago, verás numerosas bahías, grutas y pequeñas cuevas.
¿Dónde amarrar?
Casi todos los restaurantes de la bahía disponen de amarres y boyas. La bahía de la ciudad portuaria de Polače es la más segura y la mejor protegida de la isla. Sin embargo, ten en cuenta que cuando el bora es muy fuerte, el amarre puede resultar poco práctico debido a las corrientes de aire. Por su parte, el jugo de tormenta, provoca oleajes.
Puedes disfrutar de una suculenta cena en los restaurantes Ankora y Stella Maris, que tienen una excelente relación calidad precio y un servicio de lo más agradable.
Día 3 (lunes): Mljet (Polače) – Lastovo (Zaklopatica) (25 mn)
Hoy disfruta de una mañana tranquila. Si el día anterior no tuviste suficiente de la belleza de esta parte de Mljet, da una vuelta por el parque nacional. Tienes por delante otro día de navegación lleno de aventuras. El destino final será otra isla de un encanto sin límites: Lastovo, la isla habitada más remota de Croacia.
Lugares que merece la pena visitar
Además de ser una de las islas más verdes del Adriático, Lastovo también es una de las más soleadas en base a la cantidad de días al año que hace sol. No esperes que aquí llueva en verano. La ciudad de Lastovo es el asentamiento más grande. La ciudad se distribuye alrededor de la escarpada ladera en sentido opuesto al mar, lo que es poco habitual en comparación con el resto de islas adriáticas pequeñas, que suelen situarse en la costa.
A pesar de que la población es croata, esta isla fue italiana durante muchos años; concretamente, hasta la segunda guerra mundial. Tuvo un destino similar al de la isla de Vis. También estuvo cerrada a los turistas hasta el colapso de Yugoslavia.
La isla de Lastovo también está rodeada de leyendas. La más famosa es la que cuenta la humillante derrota de los piratas catalanes a manos de los locales. Tras conquistar la isla de Korčula, los piratas enviaron un mensajero a los isleños de Lastovo con un mensaje para que se rindieran. Sin embargo, los isleños se armaron y rezaron para que se produjera una tormenta que eventualmente hundió las naves de los piratas, que puede que todavía estén en el fondo del rico mundo submarino de Lastovo. La leyenda de la victoria de los isleños sobre los piratas se representa cada año en el Festival del Tesoro.
Hay otra leyenda extraña que trata sobre palmeras: más específicamente sobre su ausencia en la isla. Hay una superstición que dice que las palmeras dan mala suerte a los habitantes de las casas construidas delante suyo. En cambio, hay varios centenares de especies de hierbas medicinales, olivares y naranjos. También se conoce a Lastovo por sus cangrejos de río, langostas y morenas. Este delicioso pescado sabrá todavía mejor con el delicioso y especial vino local “maraština”.
Como dato interesante, la isla tiene la misma cantidad de iglesias que de terreno: hay 46 iglesias y Lastovo tiene una superficie de 46 kilómetros cuadrados. Incluso hay un total de 46 islotes inhabitados en las proximidades de Lastovo. Además de las muchas iglesias, verás que también hay grandes chimeneas, y que en algunos sitios están decoradas. La chimenea aparece representada en el escudo de armas de Lastovo. Se cree que cuanto mayor y más espectacular era tu chimenea, más respetado eras. En la actualidad, esto se aplica al número de oliveros que tienes.
Un acontecimiento cultural fascinante es el festival de música que se celebra a finales de julio, cuando llegan a la isla más turistas de lo normal.
¿Dónde amarrar?
La isla entera forma parte del parque nacional. El precio de la entrada varía en función de la longitud del barco. Hay cuatro campos de boyas nuevos en la isla: Zaklopatica, Veliji Lago, Skrivena Luka y la isla vecina de Saplun. Atar el barco a una boya aquí difiere ligeramente de hacerlo en otras partes, así que no rechaces la ayuda de ningún miembro del personal del parque. Se amarra a una boya tanto por proa como por popa, de tal forma que dos barcos en fila comparten tres boyas.
En la bahía de Zaklopatica, además de boyas, también hay varios amarres, que son gratuitos para los clientes de los restaurantes. La electricidad y el agua se cobran como extra. Recomendamos reservar con antelación para comer en el restaurante Triton o en el Aragust los lunes. Ambos restaurantes satisfarán tus papilas gustativas, y el personal hará que tu día sea más agradable. Si no tienes previsto cenar en un restaurante, puedes encontrar amarres (de pago) con agua y electricidad en la costa oeste de la bahía, junto al konoba Brain. El coste lo cobra la empresa Felicitas, que también vende pescado fresco y langostas.
Otra opción es amarrar en una boya o utilizar los puntos de amarre de la bahía Skrivena Luka, situada en el sur de la isla. Nautika es un buen restaurante que dispone de amarres para sus clientes. Sin embargo, prepárate para fuertes corrientes de viento durante el bora o el jugo.
Día 4 (martes): Lastovo – Korčula (22 mn)
Hoy navegarás hasta la isla de Korčula. No te arrepentirás: la ciudad de Korčula, con su inolvidable ambiente, te encantará.
Lugares que merece la pena visitar
La escarpada isla de Korčula, con sus numerosas bahías, sin duda merece que dediques un poco de tiempo a explorarla. Si tienes suficiente tiempo, puedes parar en el extremo sur de la isla, llamado Lumbarda. Los amantes de las playas de arena disfrutarán de la bahía de Przina.
La ciudad de Korčula te sorprenderá agradablemente con sus bien preservados monumentos. Gracias a su muralla con torretas y a su fortificación, se ha ganado el apodo de “pequeña Dubrovnik”. A los locales les gusta presumir del hecho que Marco Polo naciera aquí. La casa donde nació, así como el Museo Marco Polo, son atracciones populares.
El centro de la ciudad antigua está formado por estrechas calles conectadas en forma de espina de pez. Esta ingeniosa forma hace que se mantenga más fresca y que en verano la temperatura general de la ciudad sea más agradable, a la vez que la protege del viento en invierno.
Forteca Svetog Vlaha, una antigua fortaleza de piedra que tiene dos miradores, está a menos de tres cuartos de hora subiendo desde el centro de la ciudad. El fuerte tiene buenas vistas de la ciudad bajo la luz del sol poniente.
No te olvides de incluir en tu estancia una degustación de los excelentes vinos blancos locales. Además, podrás disfrutar de una comida deliciosa en Konoba Aterina y Konoba Adio Mare. Puede que también haya música dálmata en directo, lo que hará que la experiencia sea mucho más placentera. Durante el verano, se organizan espectáculos de baile dinámicos con sables por toda la isla. La conocida como “moreška” es una danza popular de Korčula.
¿Dónde amarrar?
Si tu destino es la segunda ciudad más grande de la isla, Korčula, la opción más práctica y segura es pasar la noche en la marina ACI. Esta marina, igual que toda la ciudad, está bien protegida del viento. En 2021 se llevó a cabo la reforma completa de una parte de la marina.
Puedes darte un chapuzón en una de las pequeñas playas de piedras que hay en la misma ciudad. La popular playa Banje está cerca de la marina.
Día 5 (miércoles): Korčula – Mljet (Okuklje) (28 mn)
Desde la ciudad de Korčula, puedes deshacer el camino hecho con el barco desde Dubrovnik. El destino ideal vuelve a ser la isla de Mljet, si bien la parte este en esta ocasión. Aunque no es un parque nacional, tiene el mismo encanto
Lugares que merece la pena visitar
Déjate llevar por el encanto de la naturaleza en calma, el olor del mar y los pinos. La zona noroeste de Mljet a duras penas está habitada y es muy tranquila. No obstante, los que todavía tengan ganas de cosas nuevas pueden pedir un taxi después de amarrar y visitar la gruta de Odiseo, en el sur. Se trata de una gruta preciosa a la que es más fácil acceder desde tierra. Esta gruta está envuelta en mitología griega, ya que es aquí donde Odiseo estuvo preso. Está a unos 15 minutos del aparcamiento de Tommy, y de las 12:00 a las 14:00 horas se puede ver el impresionante juego de luces del interior.
Un truco secreto es visitar la también impresionante playa de Sutmilijhoska, en el sur de la isla, a unos 20 minutos en taxi del punto de partida en Okuklje.
¿Dónde amarrar?
Te recomendamos pasar la noche en Okuklje Bay, Sobra Bay o Prožurska Luka. Estas bahías tienen boyas y amarres para los clientes de los restaurantes.
La encantadora y serena bahía de Okuklje está bien protegida frente a todo tipo de viento. La regla no escrita dice que es mejor ir para cenar en uno de los restaurantes que hay aquí, que ofrecen una gran variedad de platos. De esta forma, te aseguras el amarre gratis. Los restaurantes Maran y Maestral tienen buena reputación. También puedes disfrutar de diferentes experiencias gastronómicas en la bahía de Sobra —por ejemplo, en los restaurantes Riva o Mungos. Desafortunadamente, la tranquilidad suele verse interrumpida por la llegada del último ferry de turno.
En la bahía de Prožurska Luka, una buena opción para los que buscan un poco más de paz es Marijina Konoba, en el lado oriental, donde se puede atar el barco a una boya de amarre. Pero es mejor reservar sitio con antelación, especialmente en agosto. Hay boyas rojas y de pago que gestiona el ayuntamiento. El lado oeste de la bahía suele estar más concurrido debido al restaurante Barba. En general, evita esta bahía cuando haya viento procedente del norte (N, NE)..
Día 6 (jueves): Mljet (Okuklje) – Šipan (Šipanska Luka) (11 mn)
Ha llegado la hora de viajar a las islas más próximas a Dubrovnik, las llamadas Elafitas. Pasarás la noche en la isla más grande, Šipan, por donde no pasa el tiempo.
Lugares que merece la pena visitar
Los que todavía no hayan tenido suficiente de la isla de Mljet pueden hacer una parada en el extremo sureste de la bahía de Saplunara, famosa por su hermosa playa de arena. Hay relativamente pocos anclajes con una profundidad adecuada. Por tanto, deberías utilizar una boya de restaurante.
Al llegar a la isla de Šipan, probablemente te sorprenda la cantidad de oliveros que hay. Šipan ostenta el récord de más oliveros por metro cuadrado. En general, la vegetación es asombrosa gracias a que la isla cuenta con una de las pocas fuentes de agua dulce de la zona. La ciudad de Šipan en sí misma es un pueblo pesquero dálmata típico.
¿Dónde amarrar?
Puedes pasar la noche en un amarre o una boya de la bahía de Šipanska Luka, que está bien resguardada en todas las direcciones excepto frente al viento del NO. Cuando sopla este tipo de viento, es mejor trasladarse hacia el sur, a la bahía de Sudurad. Al jugo lo acompañan fuertes ráfagas de viento de hasta 3 Bf.
Vale la pena visitar los restaurantes Konoba Tauris y Konoba U Balda, en la bahía de Šipanska Luka. En Sudurad, una buena opción es el restaurante familiar Tri Sestre.
Día 7 (viernes): Šipan – Lopud – (Lokrum) vuelta al puerto de salida en Dubrovnik (16-25 mn)
Puedes animar la vuelta al puerto de salida con una parada en otra de las islas Elafiti: en la isla de Lopud, visitarás una de las bahías más hermosas de Croacia.
La playa de Sunj te transportará automáticamente a un destino tropical. Disfruta del mar turquesa y de los acantilados con vistas de su larga playa de arena. La única forma de anclar de forma segura en esta bahía es utilizando un ancla. La bahía no está protegida frente a los vientos del N, el SE y el E.
Otro lugar que merece una mención es la pequeña isla de Lokrum, al sur de Dubrovnik. No está habitada por personas sino por pavos reales traídos por los Habsburgo. Hay varias rutas de senderismo que conducen hasta el lago de agua salada conocido como Mar Muerto, y hasta el singular y exótico jardín botánico. Esta isla inhabitada también está asociada a una leyenda, que hará que probablemente nadie quiera o pueda pasar la noche en ella. El sobrenombre de Lokrum es “isla maldita”. Cuenta la leyenda que tiempo atrás los monjes benedictinos desaparecieron de la isla tras ser maldecidos por la nobleza de Dubrovnik. Desde entonces, todos los huéspedes o propietarios del resto de islas han sucumbido a una muerte repentina. Puedes anclar aquí (por un precio superior porque la isla alberga un jardín botánico) a una profundidad de 10-15 metros en el lado sureste.
Consejo: de regreso a ACI Marina Dubrovnik, ten cuidado en la estación de servicio. Suele haber una fuerte corriente procedente del exterior del muelle, por lo que es mejor navegar hasta el puerto en dirección contraria.
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George Bernard Shaw dijo una vez: “Los que busquen el paraíso en la tierra deberían venir a Dubrovnik.” Si Shaw hubiese sido aficionado a la navegación, no hubiera limitado dicha afirmación solo a Dubrovnik. Toda el área circundante es mágica y te sorprenderá gratamente.
Si necesitas consejo sobre barcos o itinerarios, el equipo de Boataround está aquí todos los días.